Isabel Martin
Lamentable el trato recibido por parte de la Señorita Mónica. Naturgy debería aleccionar a sus trabajadores que atienden de manera presencial a los clientes a que estos últimos sean tratados en forma correcta, con educación, respeto y empatia. Si me equivoco (porque yo, no soy profesional en esto) y en vez de solicitar una estimación de potencia, digo una estimación de consumo, no hace falta ponerse como una pantera. Tampoco es muy correcto el no repetir la corrección que con tanta soberbia había realizado tres minutos antes, si le pregunto de nuevo por el término a debatir (si hay que repetirle algo a un cliente, se le repite no se le contesta con desdén). No quiero ni llegar a pensar el trato que dispensará a otras personas más vulnerables como ancianos, visto el trato que nos ha proporcionado a nosotros, por ejemplo. Y espero que no a todas las personas las reciba mirando a su móvil, gritando "pasenporaquiiiii" y sin tan siquiera dar los buenos días. He salido de la oficina con un cambio de potencia realizado pero sin una estimación de la misma porque no se puede realizar presencialmente, no sabe bien la señorita Mónica si a través del teléfono lo podré tener pero allí in situ, no, increíble...
Espero que la señorita Mónica no me haya mentido con su nombre y espero que sus superiores lean esto y espero no tener que volver a la oficina y ser atendida por ella, porque otro trato igual de indigno, me temo que no será tolerado por mi parte. Espero que en un futuro, a dicha señorita la dispensan el mismo trato que me ha ofrecido ella a mi y a mi pareja en las diferentes tiendas a las que vaya y en los diferentes servicios que solicite . No me extiendo más, porque debo poner una queja formal en Naturgy, lo cual también es inversión de tiempo....pero hagan lo posible, si van a esa tienda, para que no les atienda esa señorita Mónica; que una cosa es tener un mal día y otra cosa es tener una falta de educación y empatia y una prepotencia y soberbia incompatibles con la atención cara al público.